corresponde al segundo tipo de obras y líricas que existen. En ella se pueden encontrar los mismos elementos que en el poema: hablante lírico, actitud lírica, objeto y tema, pero sin los elementos formales (métrica, rima) que caracterizan el verso.
Se puso un día él a cavilar, suavemente en su interior empezó a caminar, dejo a tras su mundo, ese mundo real donde tiene trabajo, deudas que pagar, situaciones que solventar, lo dejo a tras, solo para reflexionar y comprender ¿Cómo eres tú?
En los laberintos de su alma, bajo la suave corriente de su pensamiento fluye lentamente tu imagen, tu voz, tu sonrisa que ilumina el interior de este ser que sufre y llora pero, a la vez, añora por la felicidad que le brindas, por el placer y la sonrisa que provocas.
Ese ser que solo y en silencio analiza y descubre con gran alegría como eres tú.
Eres para él una belleza extraña única, una belleza impensable, inefable que solo se puede expresar en tu ser, no hay otra forma.
Como expresar ese mirar, esa figura, esa sonrisa esa forma de ser, solo podía pensar que quizás, se podría expresar en su pensamiento, al recordarte, al imaginarte ahí con él y expreso:
-Eres el momento exacto, esa situación sencilla que ve pasar el tiempo como me gusta: lento. Lento como cuando en mis labios susurran tus versos, versos que expresan lentamente mi verdad.
Esa verdad que grita a todo pulmón pero en silencio, con una mirada, con una caricia, con una sonrisa, lo increíble, lo maravilloso, lo esplendoroso que fue el que aparecieras en mi vida.
Eres tú y nadie más que tú, tú eres su mundo, tú eres la música, tú eres la luz, los sentimientos, como explicar la belleza de una tarde de sol brillando entre las ramas de los arboles, jugando entre las flores.
Eres como los aromas de los más bellos perfumes, de los más bellas flores, que impregnan el ambiente cuando aparecen, así, así eres tu cuando entras en mi vida, dejas tu esencia impregnada en la mía-
Con la mirada perdida
Los pensamientos se agolpan
De uno a uno, todos se estorban
Viendo el filme de su vida
Corre uno a uno por sus ojos
Los recuerdos felices
De amores puros y deslices
O el corazón roto en trozos
Se ve a la par de su madre
Cuando en la niñez abrazaba sus piernas
Recibiendo caricias tiernas
O de la mano de su padre
Luego en su juventud lozanía
El fuego de la pasión
Al verle, casi estalla el corazón
Imágenes ya en la lejanía
Recuerda también aquella tarde
Cuando el cielo caía lento
Recuerda como quedo sin aliento…
Aquella primera despedida aun arde
Duele mucho ver su llanto
Como quedo en soledad
Con el corazón partido por la mitad
Ya con la noche como manto
Recuerda después felizmente
Que al poco tiempo encontró
Lo que al cielo tanto rogo
Al amor de su vida, está en su mente
Los momentos de mutua entrega
De mucho cariño de inocente candor
De loca y desenfrenada pasión y de mucho amor
Al recuerdo su cuerpo aún se descompone y pliega
Ve a sus hijos sonriendo
Sus retoños fuertes y lozanos
A cada uno y en conjunto los hermanos
Ve cómo van creciendo
Cada uno se hace adulto
Caminan por la vida de frente
Sus logros aun los siente
Son como un indulto
A todos los errores
Que pudo haber cometido
Errores tontos y sin sentido
De su experiencia ahora constructores
Ve como uno a uno se van de casa
Realizan sus sueños
Se hacen de sus vidas dueños
Y cada quien su porvenir amasa
Luego ve su rostro con algunas arrugas
En el cabello breves matices de plata
Pero en la mirada fuego que su alma delata
Que su espíritu aún no se subyuga
Ve las tardes de su adultez con su amor
Su compañía de toda la vida
Las tertulias, las risas, rutina no aburrida
Ese amor que le da a su existencia sabor
Luego ve a los nietos
Y como los consiente
Les da más de lo pertinente
Y los papás pone en aprietos
Recuerda el dolor sufrido
Añora las alegrías compartidas
Las lágrimas en las despedidas
Cuando se va un ser querido
Al amor de su vida ve partir
Desde ese día su mirada es más nostálgica
Ese partir su vida mucho complica
Llora al ver su amor morir
Luego… la soledad
Esa soledad del hogar
De la vida, del esperar
Que le provoca ansiedad
Los fantasmas del pasado
Recorren los salones
Las risas parece la casa
Han del todo abandonado
En la fría soledad aguarda
Consiente que su vida es plena
Como el criminal cumple su pena
Su espíritu cobija y resguarda
Es posible que esta noche de luna
Llegue la tan esperada visita
Que con esmero se prepara para su cita
Duda en su mente no hay ninguna
Sabe que podrá ver de frente
A su amiga pálida nunca amarga
Siempre dulce amiga parda
A la tibia y sabia muerte
La espera paciente
Para encontrase con su amor
Y decirle con mucho fervor
Lo que aun siente
Suave…
Suave como piel de niña
Como piel de cabrito
Como seda translucida
Translucida…
Como el cristal más puro
Como el aire dela montaña
Como del riachuelo virgen es el agua
Agua…
Que refresca los campos
Que hidrata las praderas
Que inunda mis pupilas
Pupilas…
En las Pupilas mías
Así, Suave, traslucida como Agua
Es en cada amanecer
Tu sonrisa amada mía
Imagen tomada de la red Pintor y Dibujante: Vicente Romero Redondo, Nació en 1956 (Madrid España)
Cual estoica montaña majestuosa Tu figura de diosa se encuentra entre sombras Discretos tus ojos se mueven en la penumbra De esta estancia quieta y silenciosa La luz del sol ya se extinguió en el cielo Dando lugar a la luz pálida de Selene Que viene esta vez un poco retrasada Aparece como distraída y bajo el tedio El tedio que surge de la rutina Esa maldita rutina que te lleva a la ruina Yo te miro en silencio entre las sombras Observo cada uno de tus movimientos Guardo en mi mente las imágenes, ahora, recuerdos Tus caricias sobre tu cabellera cuando te preparas a dormir Como desnudas tus carnes y las vistes para ir a la cama Pero lo que más impresiona es ese silencio Un silencio que invade el ambiente Silencio que se encierra en tu misterio Que dice mil cosas sin decir nada No dejabas de mirar sin ver No pronuncias palabras, ángel mustio Belleza atemporal de mi vida Tus silencios dicen mucho a mi alma Cuando te preparas para ir a la cama Sabiendo que yo te miro Solo sonríes de vez en cuando a través del espejo La luz de tu sonrisa ilumina tu reflejo Yo quedo extasiado esperando romper tu silencio Ese silencio que impregna de aroma afrodisiaco el ambiente Yo se la razón de tus silencios Esos silencios que anteceden los sonidos que surgen al amar Herbert D. Figueroa B. Miércoles 04 de febrero del 2015
Arropado por mis miedos
Reforzados por mis complejos
El cerrojo de mi alma he roto
Queriendo escapar de la fría soledad
Me encuentro solo en medio de la nada
Bajo la luz de este sencillo farol
Acurrucando mi sobresalto en mis piernas
Deseando sentir esa rigidez de mi espalda
Desaparecer suave y tibiamente
Y sentirme ligero como una pluma
Como una burbuja que se eleva
Más con el miedo de explotar
De despertar de este sueño falaz
De esta triste fantasía de ansiedad
Me encuentro solo como siempre
Esperando con ansias ese sonido
El sonido de tu voz
Llamándome con calidez, con sencillez
Me invade el silencio
Como cuando llega la noche
Hoy me siento perdido y solo tu
Solo tú eres ese faro
Que me puede mostrar el camino
El camino de la cordura
De la alegría el bienestar
Si… aquí estoy en medio de la nada
Arropando mis miedos
Acompañado de mis complejos
Esperando tu voz a través del teléfono
Esperando tu respuesta a la pregunta
Que te hice…
Cuando te mostré mi Alma Desnuda
Lentamente los dedos corren sobre las teclas, susurrando caricias con las letras, suavemente someten una a una a las desdichadas, que sin más remedio tienen que ir expresando cada palabra, sucumben ante el atroz ataque de las manos, imprimen en la pantalla las emociones que describen los dedos, una a una las voces dormidas en el pensamiento, van naciendo, suaves, mustias, lentamente se abren paso por las líneas de la hoja.
Ojala sepa a donde va, ojala y encuentre razón para este escrito, ojala no sea otro roto edicto, que nunca sale a luz, porque se mantiene ahí esperando que se complete, que se libere y salga para que alguien más lo lea, lo disfrute, lo comprenda y lo hago suyo, que exprese el pensamiento de quien lo escribe y se identifique en el quien lo lee.
Pero qué extraño, hoy no hay tema central, simplemente va de un lado a otro, esperando esbozar una sonrisa o quizás una lagrima, una caricia o un desaire, no lo sé, simplemente vuelan los dedos sobre las teclas, como si fueran barcos surcando los mares, como aves sobre el manto de árboles, quien sabe, quizás si exista un tema central, no lo sé, los dedos solo se dejan llevar por el éxtasis del que escribe, que lo impulsa a seguir, presionando locamente las teclas, rápidamente, furioso y con violencia, como si el tiempo se agotara demasiado pronto, como si el espacio se ensanchara sin límite, recuerda con nostalgia los días aquellos o quizás será mejor pensar en los venideros, estará bien escribir sobre un sentimiento puro y bello o mejor será gritar con fuerte voz sin sonido una angustia por el desamor vivido.
No lo sé, no sé si gustara esto o aquello a quien lea estas líneas, solo sé que se escriben como versos desesperados, desgarrados que tratan de liberar por un momento al ser, de la monotonía del trabajo, de la espera en silencio, de las presiones del día a día; ¿Sera que gustaran quizás algún día?, no lo sé, y quizás nunca lo sepa solo sé que mi alma se encuentra borracha, extasiada, mística, como en un trance sin poder parar, sin poder razonar a conciencia lo que escribe sin demora, como un autómata, se escriben estas letras dejándose llevar a la deriva, por la mar de la inspiración, sin más rumbo que lo que el escrito esboce o deje entrever en cada una de sus líneas, solo se que el alma se siente libre, radiante, ausente de penas y tristezas, se regodea feliz andando sola… a la deriva de las letras, palabundreando, sin rumbo fijo.
Herbert D. Figueroa B.
Lunes 26 de Enero del 2015
PD. Escrito en más o menos 15 minutos, sin tema, solo el gusto de escribir, por cierto, el nombre es la unión entre Palabra y Vagabundear. (Lo siento si ofendo a alguien con esto)
Amanecí dulcemente entre tus brazos
La luz del alba rozo tímidamente tu piel
Cual beso tierno del amante fiel
Y mostro de tu rostro los bellos trazos
Fue un instante hermoso
Sentirme arropado por tus manos
Mientras sentía en mi rostro tus suspiros
No podría haber hombre más orgulloso
Sentir la cálida calma de ese instante
La quietud de la mañana despertando
Me sentí dichoso y te seguí mirando
Abrazando fuertemente tu cuerpo palpitante
Fue un instante hermoso
Simplemente te digo gracias…
Me sentí dichoso
Herbert D. Figueroa B.
Viernes 19 de diciembre del 2014
Yo que sin ti creí firmemente que iba morir
Que irremediablemente no podría ya vivir
Porque eras la base y centro de mi existir
Que no habría manera de continuar o seguir
Tu que no me dejaste más, seguir contigo
Ahora a ti querida tristemente te digo
Que por la cruel burla del juguetón destino
Hoy tu estas sola, y ahora, hay alguien más conmigo
Llegar al punto de quiebre de tu voz Donde desgarras tu alma en un sentimiento Mientras elevas tu corazón al viento Rompiendo en llanto, risas, amor o sufrimientos
Donde el dolor a flor de piel en el sonido Abre cruelmente la ilusión rota De aquel triste mendigo que en cada nota Hace eco glorioso en tu sentido
O quizás encuentre en tu cantar un nicho Que rompa en risa y alegría por tu canto Haciendo que de felicidad brote el llanto Ya que gritas su sentir amoroso nunca dicho
Tal vez sea el vínculo tierno y puro Que emana del lazo hábilmente tejido De dos corazones que en un sutil quejido Encuentran la puerta que rompe el muro
Muro que encierra la salvaje pasión Que hace arder la sangre en las venas Disfrutando de su relación a manos llenas Escapando de cada cual fuera de razón
O es el tierno beso cándido y sonoro Que estalla en los pechos amorosos De los amantes que tímidamente temerosos Encuentra libertad en tus palabras hechas coro
Allá, allá donde tu timbre es más alto Donde tu sentir se vuelve libre Haciendo que el espíritu vibre Descubriendo los sentimientos hechos canto
Gracias cantor por darnos tu cantar Por el regalo de tu talento De tu alegría, risa, llanto o sufrimiento Gracias por permitirnos tu canto escuchar
Tengo que decirte yo solo soy del mundo
Y tu ángel mío no eres de este
Para mal de ambos tristemente
Lo he descubierto en este segundo
Perdona mi triste llanto fecundo
Ambos llegamos impuntualmente
A la cita quizás más importante
De encontrarnos en el mismo rumbo
Cruzamos miradas y el alma se inundo
Pero ambos llegamos lamentablemente tarde
Y al corazón congojado de dolor fuertemente arde
Casi estalla, está herido, moribundo
Pero como dije yo soy de la vida humana oriundo
Cruelmente Tú al universo celestial perteneces
Y aunque mi esperanza me anima a veces
Sé que nuestro duro final es rotundo
Ya que yo soy de este mundo
Y tu ángel hermoso
Eres del paraíso glorioso
Te encontré tarde, solo un segundo